Porque consumir jarabe de arce canadiense

El jarabe de arce canadiense es muy popular y apreciado en Canadá y América del Norte, donde se usa como guarnición, por ejemplo con pancakes, y en la preparación de postres en general como sustituto del azúcar. De hecho, es un producto con miles de usos porque es rico en propiedades beneficiosas gracias a los nutrientes que lo componen y permiten llamarlo «oro líquido». Descubramos los orígenes del jarabe de arce canadiense y cómo podemos usarlo a diario.

La producción del jarabe de arce

La producción de jarabe de arce es una tradición antigua que se ha convertido en un símbolo de América del Norte y, en particular, de Canadá, que cuenta con el 80% de la producción mundial total de este edulcorante.

El jarabe de arce es un edulcorante completamente natural ya que está compuesto por la savia de dos tipos de arce, el azúcar y el arce negro. La savia se extrae de los árboles en primavera, mediante el uso de tubos insertados directamente en el corazón de la planta. La tradición dice que la savia extraída se hierve y finalmente se filtra. Dependiendo del nivel de refinación, el jarabe de arce canadiense se clasifica en 3 categorías: el grado A es el más refinado, caracterizado por un color ligero, casi transparente y un sabor delicado, el grado B es el término medio entre las dos categorías y tiene un color ámbar y un sabor más intenso, el grado C, por otro lado, es el más puro, con un color oscuro y un sabor fuerte con una consistencia con mucho cuerpo.

Jarabe de arce: propiedades y beneficios

El jarabe de arce también se conoce como «oro líquido canadiense» porque es una verdadera concentración de bienestar. De hecho, es muy rico en vitaminas B y sales minerales, como potasio, calcio, hierro, zinc y manganeso, que lo convierten en un complemento alimenticio perfecto. Pero las propiedades del jarabe de arce no terminan ahí: es un aliado perfecto para los deportistas porque tiene una excelente acción energizante, también es un antioxidante natural y actúa como un agente purificador y drenante porque estimula la diuresis, liberando al cuerpo del exceso de toxinas. El jarabe de arce tiene un índice glucémico muy bajo, una característica que lo convierte en el edulcorante perfecto para quienes padecen diabetes tipo 2, pero también para aquellos que siguen una dieta: es naturalmente bajo en sodio, grasas saturadas y colesterol. El mundo de la cosmética también es consciente de los numerosos beneficios del jarabe de arce: sus propiedades antioxidantes se emplean para la creación de cremas y exfoliantes anti-edad y productos para fortalecer el cabello.

El jarabe de arce en Italia

Muy popular y extendido en América del Norte, el jarabe de arce en Italia todavía no es muy conocido y utilizado, a pesar de sus altos valores nutricionales. ¡Pero para probar el verdadero sabor de este oro líquido, sólo tienes que entrar en una heladería RivaReno! Los mejores productos de alta calidad italiana se combinan con la tradición y las costumbres de Canadá para darle vida al helado New York New York: lo preparamos todos los días utilizando sólo el original jarabe de arce canadiense y orgánico combinado con nueces caramelizadas para dar vida a un sabor único y delicioso, ¡un verdadero viaje sensorial para descubrir Canadá!